La ciudad de los espías

En la imagen: sello conmemorativo de la que fue agente soviética África de las Heras, nacida en Ceuta, curtida en los patrulleros de las JSUC en Barcelona, a comienzos de la guerra civil y con los años, la agente más condecorada del NKVD-KGB

Espíes de Barcelona de Roser Messa es una obra divertida, encuadrada en ese estilo de guías alternativas que recuerdan aquel célebre precedente de la Guía secreta de Barcelona publicada por Josep María Carandell en los 70s. Ese tipo de libros tienen el atractivo de ser un guiño constante para cualquier barcelonés (o visitante enterado) que enriquece su conocimiento de la ciudad con la sorpresa de que aquel rincón que conocía desde pequeño esconde en realidad una historia sorprendente. Y todo cobra entonces otro sentido.

El libro de Messa es un compendio de historias de espías enmarcadas en la ciudad de Barcelona, que abarcan desde la vida de Mossen Borra entre los siglos XIV y XV, a la del fotógrafo Francesc Boix, que practicó el espionaje de supervivencia en el campo de concentración y exterminio de Mauthausen, durante la Segunda Guerra Mundial.

Son un total de dieciséis historias que si bien necesitarían de un mejor contexto histórico, no están mal documentadas y, sobre todo, son una aportación atractiva y un punto desenfadada a la narrativa del espionaje que en España -quizá más que en Cataluña- suele estar penalizada por una aproximación más bien tremendista. En Espíe

s de Barcelona faltan nombres importantes, desde luego, pero se recogen también historias menos tópicas, como las de África de las Heras o Pilar Millán Astray que ilustran sobre las mil y una motivaciones por las que una persona cualquiera puede terminar teniendo un protagonismo en la historia mayor del que cabría considerar en una vida aparentemente gris.